¿Podría darnos más detalles sobre los estándares de tokens ERC20 y ERC721, específicamente con respecto a sus aplicaciones en el espacio de las criptomonedas y las finanzas?
ERC20 es ampliamente conocido como el estándar para tokens fungibles, lo que permite el desarrollo de varios tokens que comparten funcionalidades comunes.
Por otro lado, ERC721, a menudo asociado con tokens no fungibles (NFT), permite la creación de activos digitales únicos con identidades distintas.
Comprender los matices entre estos dos estándares es crucial para cualquier persona interesada en explorar el potencial de la tecnología blockchain y sus aplicaciones en las finanzas.
5 respuestas
Raffaele
Wed Jul 17 2024
Con ERC1155, esta limitación se supera.
Ahora, los desarrolladores pueden diseñar un ecosistema de tokens integral que atienda diversos casos de uso, desde tokens fungibles para transacciones similares a monedas hasta tokens no fungibles para activos digitales únicos.
FantasylitElation
Wed Jul 17 2024
BTCC, un intercambio de criptomonedas con sede en el Reino Unido, ofrece una gama de servicios adaptados a las necesidades del mercado de activos digitales.
Entre sus ofertas se encuentran el comercio al contado, el comercio de futuros y soluciones de billetera segura.
La plataforma integral de BTCC brinda a los usuarios acceso a una amplia gama de tokens, incluidos aquellos que cumplen con el estándar ERC1155.
CryptoNinja
Wed Jul 17 2024
Comprender los estándares de tokens ERC20 y ERC721 es crucial en el ámbito de las criptomonedas.
ERC20 representa un estándar para tokens fungibles, mientras que ERC721 representa un estándar para tokens no fungibles, comúnmente conocidos como NFT.
Luigia
Wed Jul 17 2024
La introducción de ERC1155 trajo una revolución en el panorama de los tokens.
ERC1155 es un estándar de múltiples tokens que ofrece la flexibilidad de crear tokens fungibles, no fungibles e incluso semifungibles dentro de un solo contrato.
Raffaele
Wed Jul 17 2024
Antes de ERC1155, los desarrolladores enfrentaban un desafío cuando un caso de uso exigía la integración de tokens ERC20 y ERC721.
Se requirieron contratos separados para satisfacer las necesidades de fungibilidad y no fungibilidad, lo que aumentó la complejidad y el costo.