¿Qué es el libre comercio y cómo funciona?

El libre comercio es una política económica fundamental adoptada por los gobiernos para facilitar el libre flujo de bienes y servicios a través de las fronteras internacionales. Se basa en el principio de no discriminación contra las importaciones y no interferencia con las exportaciones.

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La implementación del libre comercio implica abstenerse de imponer aranceles, que son impuestos que gravan las importaciones, o de otorgar subsidios a las exportaciones. Este enfoque tiene como objetivo eliminar las barreras que obstaculizan el intercambio fluido de productos y servicios entre naciones.

Si bien el libre comercio fomenta el movimiento irrestricto del comercio, no significa necesariamente un abandono total del control gubernamental sobre las importaciones y exportaciones. Los países aún pueden mantener regulaciones para proteger las industrias nacionales, los consumidores y los intereses de seguridad nacional.

La adopción de políticas de libre comercio a menudo está motivada por la creencia de que promueve el crecimiento económico, aumenta la competencia y mejora el bienestar del consumidor. Al permitir que las empresas accedan a una gama más amplia de proveedores y consumidores, el libre comercio puede fomentar la innovación y la eficiencia.